El Evangelio de Judas

La Red Noticiosa informa que esta semana la Sociedad Geográfica Nacional (NGS) revelό el hallazgo de un antiguo manuscrito gnόstico.

El documento pretende datar de hace 1700 años, y contener el Evangelio de Judas Iscariote, en el que ese discípulo dialoga con su Maestro.

Los eruditos de la Iglesia Adventista Mundial declaran que el texto NO es un auténtico evangelio, ni contiene buenas nuevas.

En su tiempo fue una herejía, y lo es todavía, declara el Dr. Gerhard Pfandl, Director Asociado del Instituto de Investigaciones Bíblicas, experto en arqueología del Antiguo Cercano Oriente.
A diferencia de los otros evangelistas, que pintan a Judas como el traidor que entregό al Salvador, este presunto “evangelio” lo presenta como cumpliendo un pedido de Jesύs.

Esta es la historia que la mundialmente conocida National Geographic Magazine ofrece a sus lectores en su entrega de mayo prόximo.

El cόdigo citado comienza su texto con estas palabras: “Relato secreto de la revelaciόn que Jesύs dio a Judas durante una semana, tres días antes de celebrar la pasiόn.”

Su eje temático refleja conocidas posturas tradicionales de los gnόsticos.
Presume que Jesύs se rio de sus discípulos por orar a su Padre… Luego narra que Cristo habría encargado a ese discípulo entregarlo al sacrificio, para “liberarlo de las ataduras de la carne, y permitirle manifestar así su divinidad.”

“Tal enfoque puede parecer interesante –explica el Dr. W. Larry Richards, Director del Centro de Investigaciones de Manuscritos Griegos, de la Universidad Andrews–, pero no se ajusta al evangelio.”

La Biblia enseña que las obras no salvan a la persona, sino la Persona de Cristo actuando en la vida del creyente.

Los gnόsticos creían que el cuerpo es malo, y hay que destruirlo para alcanzar la salvaciόn. Esto constituye un ataque al evangelio, en el que la persona humana es una trilogía compuesta de mente, cuerpo y espíritu.

Creemos que el Canon Sagrado se cerrό hace ya mucho tiempo, y nos adherimos a la participaciόn del Espíritu Santo en favor de la Iglesia Cristiana.
No necesitamos “nuevas revelaciones” que debiliten la fe del creyente.

El Dr. Gregg King, profesor de la Universidad Adventista del Sur, en Tennessee, añade que el hallazgo es importante, pero no por lo que se pregona.
No refuerza, sino que contradice el corazόn del evangelio.

(Gracias Doctor Noe Ruiloba por la aportacion)