Relato: Historia de mi padre

Papi despertó aquella mañana con una resaca y un tufo insoportables. La noche anterior se había pegado una parranda fuera de casa y bebió como un loco, de modo que ni siquiera se acordaba como había vuelto a su casa.
Preso de una dolor de cabeza lacerante, dolidos todos los músculos del cuerpo, la garganta más reseca que lengua de loro; en la boca un sabor a cobre y a vinagre.
Tenía miedo aún de abrir los ojos pues lo aguardaba de seguro el enojo de mi madre. Mi mama se ponía como un demonio cuando papi llegaba en tal estado, y así, salir del cuarto era para él como salir de la celda para ir a la sala de ejecución.
Abrió los ojos como pudo, y lo que vió lo dejó maravillado. Sobre la mesa de noche estaba una pequeña hielera llena de cubitos de hielo con dos cervezas heladas. Al lado, había un par de Alka-Seltzers y un vaso de agua. Recargado en el vaso estaba un sobrecito color de rosa, perfumado. Mi papa anonadado abrió el sobre y en su interior halló un recado que decía:

"Amor mío, vida de mi vida: Perdona que no esté aquí para atenderte. Salí un momento, pero regreso al rato para estar contigo. Te he dejado estas cosas sobre la mesita para que alivies el malestar que quizá sientas tras de la diversión de anoche, diversión que entiendo, necesitas por las tensiones del trabajo.
Te he preparado tu sopa preferida, (tres carnes:cerdo, pollo y res) que te espera en el comedor. Le pedí Danilo que te lo sirva y que esté al pendiente de tí para lo que se te ofrezca. Te dejo un beso con todo mi amor. Tu esposa que te adora" .


Mi padre no daba crédito a sus ojos. Bebió con deleite las dos cervezas, hizo sus abluciones matutinas, se vistió y bajo al comedor.

Ahí en efecto lo esperaba yo, lo salude con cariño y le servi el caldo preparado por mami. Se lo comió en silencio, Pero muy asombrado.

¿Qué estaba sucediendo? ¿Soñaba acaso? ¿Era aquello una vana ilusión de los sentidos?.
Se atrevió a preguntarme con timidez:
"¿ Qué pasó anoche, hijo?".

Y yo con algo de temor le conte el porque de tantas atenciones:

"-Llegaste a las 3 de la mañana y venías en completo estado de ebriedad, chocaste el Motor en la puerta de la cocina, le diste una patada al gato; te vomitaste en la sala y arruinaste la alfombra que mi mamá acababa de comprar. Luego te caíste en la escalera y ahí quedaste privado, sin sentido. Tuvo que despertarme mi mamá para que la ayudara a llevarte a la apocento y ponerte en tu cama".

"¿Entonces? -pregunta mi papa- ¿por qué todo esto? ¿por qué las cervecitas, y la cartita, y la sopa especial y todas estas finas atenciones?".

A lo que yo le respondi:

"Porque mamá te iba a desvestir en la cama para que durmieras y cuando empezó a bajarte los pantalones tu dijiste:

" ¡¡¡ QUIETA Señora !!! Que soy casado".