Da gracias a Dios
Da gracias, por la vida misma, aunque la tuya no sea la más perfecta. Dios te la dio y el tenerla es ya un milagro. Aprende a valorarla para hacerla llevadera. No hagas de ella algo vano y vacío.
Da gracias por el aire que respiras. Es tan natural y vital y ni cuenta te das de que sin él con seguridad no vivirías. Por cada respiro que des recuerda y ten presente que Dios lo creó pensando en ti.
Da gracias por la luz del sol. Es la que te permite ver el día en esplendor. La que da vida a la hermosura de la creación y da calor a los seres vivos de la tierra.
Da gracias por la noche. Dios la hizo para darnos descanso. Para que la tierra repose del afán del día, y es cuando realmente puedes relajarte y meditar para reponer fuerzas y seguir adelante.
Da gracias por el agua que cae del cielo. Dios la envía para hacer nuestro suelo fértil y productivo. Y es la misma agua que al estar sedientos calma nuestra sed.
Da gracias por las pruebas que llegan a ti. No te lamentes cuando éstas llegan, más bien tómalas de un modo positivo. Las pruebas purifican tu espíritu y te hacen más fuerte y humilde.
Da gracias por todo lo que eres. No te quejes de que no siempre es como tú quieres. Dios permite todo lo que llega a tu vida, pero lo permite porque todo tiene su razón de ser. Nada pasa sólo porque sí, al final verás y entenderás la razón.
Da gracias a Dios por todo, por las cosas grandes y aún por pequeñeces. Él, muy agradecido, te recompensará. Da siempre gracias. Sentirás alivio y paz si las das de corazón.
Autor Desconocido
Da gracias por el aire que respiras. Es tan natural y vital y ni cuenta te das de que sin él con seguridad no vivirías. Por cada respiro que des recuerda y ten presente que Dios lo creó pensando en ti.
Da gracias por la luz del sol. Es la que te permite ver el día en esplendor. La que da vida a la hermosura de la creación y da calor a los seres vivos de la tierra.
Da gracias por la noche. Dios la hizo para darnos descanso. Para que la tierra repose del afán del día, y es cuando realmente puedes relajarte y meditar para reponer fuerzas y seguir adelante.
Da gracias por el agua que cae del cielo. Dios la envía para hacer nuestro suelo fértil y productivo. Y es la misma agua que al estar sedientos calma nuestra sed.
Da gracias por las pruebas que llegan a ti. No te lamentes cuando éstas llegan, más bien tómalas de un modo positivo. Las pruebas purifican tu espíritu y te hacen más fuerte y humilde.
Da gracias por todo lo que eres. No te quejes de que no siempre es como tú quieres. Dios permite todo lo que llega a tu vida, pero lo permite porque todo tiene su razón de ser. Nada pasa sólo porque sí, al final verás y entenderás la razón.
Da gracias a Dios por todo, por las cosas grandes y aún por pequeñeces. Él, muy agradecido, te recompensará. Da siempre gracias. Sentirás alivio y paz si las das de corazón.
Autor Desconocido
Labels: (Gracias Lucy Castro), Motivacion, reflexion
0 Comments:
Post a Comment
<< Home